Aunque la película no está mal, he de decir que no merecía ganar el Goya a revelación por encima de la excelente La vida de nadie. En cuanto al reparto, Eduard Fernández y Antonio Dechent están soberbios aunque se nota que actuaban sin guión (porque esta peli por mucho que se empeñen algunos, se nota que no son más que improvisaciones de los actores a los que sólo se les ha dado una pauta de lo que tienen que hacer o decir, y de algo no sabre pero de improvisaciones he echo unas cuantas y las reconozco a la legua), y lo peor sin dudarlo es ese actor que no recuerdo el nombre que tiene un ataque de locura en el water, una de las peores escenas que he visto en mucho tiempo y que joden el acabado de la película.